Por segundo día corrido Miguel Cabrera y Víctor Martínez vieron acción. Esta vez debían enfrentar pitchers de Grandes Ligas por primera vez en el año y aunque los resultados no fueron del todo bueno en el terreno, esa no era la parte importante de esta historia.
Los criollos volvieron a demostrar que están a buen tiempo en su carrera para llegar en condiciones al día inaugural de la campaña.
Cabrera, quien se recupera de una operación en el tobillo, consiguió un hit en su último turno, luego de poncharse dos veces ante AJ Cole, de los Nacionales. “Fallé par de pelotas en mi primeros turnos”, contó el maracayero a la prensa de Detroit. “Cuando juegas en las mayores puedes fallar pitcheos, pero cuando te tiran uno en el medio tienes que dar un hit. De eso se trata, de batear errores”, dijo el inicialista de los Tigres.
Cabrera alineó de bateador designado, aunque le gustaría cubrir pronto la primera base. “Veamos qué dice el mánager y el tráiner. Jugaré un partido más como designado y con suerte volveré a la inicial”, indicó quien no pierde la esperanza de ver su nombre en el primer lineup que tengan los Tigres en la campaña. “Creo que mi pie y mi tobillo me dirán si voy a poder jugar en la jornada inaugural”.
Por su parte, Martínez, que sana de una cirugía en una de las rodillas, también fue designado, aunque en un partido ante los Bravos de Atlanta. Se fue de 3-0, con un ponche. “Soy positivo en que vamos a estar ahí (en el primer juego del año)”, dijo Cabrera. “Víctor va a estar ahí. Estaremos al cien por ciento para el primer día de la temporada”.
A pesar del avance de los criollos, el mánager Brad Ausmus no quiere hacerse ilusiones por ahora. “Que estén jugando no significa que estarán listos”, aseguró el piloto.
Sandoval la vio clarita
Entre los criollos que tuvieron una buena jornada de ayer, destaca Pablo Sandoval, quien pegó par de sencillos y anotó una carrera en tres turnos para los Medias Rojas de Boston. El “Panda”alineó como antesalista y tercer bate, ayudando a los patirrojos a vencer con pizarra 7-6 a los Filis de Filadelfia. En ese mismo encuentro, Andrés Eloy Blanco, anotó una rayita y empujó dos para los cuáqueros, mientras que Odúbel Herrera pisó el plato una vez, luego de negociar un boleto en tres viajes a la caja de bateo. Desde la lomita lucieron Edwin Escobar, Bruce Rondón y José Mijares, al no permitir carreras en sus respectivas presentaciones.
